El Grupo Municipal Popular de Pollos denuncia la irregular y chapucera compra y enajenación de un dumper por parte del Ayuntamiento, incumpliendo todos los trámites administrativos

El Ayuntamiento de Pollos compró un dumper para uso municipal sin factura y por tanto sin IVA. El vehículo ha estado funcionando durante 6 años sin matricular, sin seguro y sin ITV, y además se ha desprendido del mismo sin realizar el más mínimo trámite administrativo.

Esta es otra ilegal e irregular actuación del Sr. Alcalde de Pollos, Javier García Rojo, que se une a su “brillante” gestión económica, con cerca de 200.000€ pendientes de pago, de los cuales 106.698€ corresponden a la cuenta 413 “Acreedores por operaciones pendientes de aplicar a presupuesto”, que recoge las obligaciones derivadas de gastos realizados o bienes y servicios sin la correspondiente partida presupuestaria.

Los hechos denunciados se inician en 2013 cuando el Sr. Alcalde compra un vehículo dumper para uso municipal sin factura y por tanto sin IVA, realizando el ayuntamiento una transferencia bancaria por importe de 3.500€.

Este vehículo no tiene matrícula y desconocemos si está dado de baja en Tráfico y como se ha realizado la transferencia, si esta se ha llevado a cabo. Lo que si conocemos es que el dumper ha circulado por las calles de Pollos sin matrícula, sin seguro y sin ITV durante 6 años.

Y hubiera seguido circulando si no fuera porque en agosto de 2019 una empleada temporal tuvo un accidente conduciendo el dumper, sufriendo lesiones y produciendo daños en una trasera particular, desconociendo lo que ha costado la reparación de la misma y a cargo de que partida se ha realizado.

Pero las irregularidades no quedan aquí. El Sr. Alcalde ha vendido el dumper en cuestión por 1.000€, sin tasación, sin autorizarlo el pleno, sin declararlo efecto no utilizable si estuviera deteriorado, saltándose toda la normativa existente y aplicable, y además lo hace compensando deudas con un proveedor.

Y esto sigue. El Ayuntamiento ha adquirido otro dumper por importe de 5.808 €, y para ello ha tenido que levantar un reparo de intervención en pleno, una vez más, ya que no existe crédito presupuestario para realizar la compra y es imposible realizar una modificación presupuestaria dada la situación económica del ayuntamiento, que ha liquidado el último ejercicio con Remanente líquido de tesorería negativo.

En resumen, ¿Se puede hacer peor?